TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
69
ARTÍCULOS LIBRES
Experiencias y Voces de
Discapacidad en la Universidad
Experiences and Voices of Disability at the
University
Idania Macarena Muñoz Rubia
Resumen
Las experiencias, voces y sentires de las personas con discapacidad fueron de-
jadas históricamente de lado, o directamente fueron negadas por las perspec-
tivas teóricas biologicistas y materialistas, tanto del modelo médico como del
modelo social respectivamente. En esta investigación, se pretende analizar
las experiencias de personas con discapacidad de la Universidad Nacional de
San Juan (UNSJ) a partir de las significaciones que les otorgan a sus propias
vivencias.
Los objetivos específicos buscan caracterizar y problematizar los principales
aportes del modelo médico y modelo social en relación a las experiencias vivi-
das desde la dimensión corporal de las personas con discapacidad, también,
relevar experiencias de estudiantes con discapacidad de la UNSJ y reconstruir
e interpretar los supuestos presentes en los relatos vivenciales de las experien-
cias relevadas.
Recepción: 17/05/2023
Aceptación: 14/08/2023
Idania Macarena Muñoz Rubia. Licen-
ciado en Trabajo Social. CONICET. IISE-
UNSJ.
mr18@hotmail.com
Palabras clave
Discapacidad, Experiencia, Universidad
Key Word
Disability, Experience, University
Imagen de Freepik
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
70Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
La metodología utilizada es de tipo cualitativa con carácter exploratorio-des-
criptivo, basado en técnicas de reconstrucción bibliográfica-documental, de
recolección y análisis de datos, tal como es el caso de las entrevistas semi-es-
tructuradas principalmente.
Los resultados principales relejan una constante conjunción de percepciones
ligadas a diferentes formas de comprender y vivir la discapacidad que dan
cuenta de la aún vigente lucha de las perspectivas de los modelos teóricos
abordados en este trabajo, esto es, del modelo médico y social.
Abstract
The experiences, voices and feelings of people with disabilities were
historically let aside, or directly denied by the biologicist and materialistic
theoretical perspectives of the medical and social models, respectively. This
research aims to analyze the experiences of people with disabilities at the
National University of San Juan (UNSJ) from the meanings they give to their
own experiences.
The specific objectives seek to characterize and problematize the main
contributions of the medical model and the social model in relation to the
experiences lived from the bodily dimension of people with disabilities,
also, to survey experiences of students with disabilities from the UNSJ and
to reconstruct and interpret the assumptions present in the experiential
accounts of the experiences surveyed.
The methodology used is qualitative with an exploratory character, based on
bibliographic-documentary reconstruction techniques, data collection and
analysis, such as semi-structured interviews mainly.
The main results relect a constant conjunction of perceptions linked to
diferent ways of understanding and living disability that show the still
current struggle of the perspectives of the theoretical models addressed in
this work, that is, the medical and social model.
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
71Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
1. Introducción
La presente investigación pretende contribuir a la pro-
ducción de conocimiento sobre la temática de Discapa-
cidad y Universidad desde un trabajo teórico, analítico
y relexivo, pertinente al escenario del Gran San Juan.
Es importante aclarar, que la misma fue llevada a cabo
mediante una beca interna de investigación CICITCA/
UNSJ- Nivel iniciación en el periodo 2020-2022
1
.
El contenido principal de este escrito, busca analizar las
experiencias de personas con discapacidad de la UNSJ a
partir de las significaciones que le otorgan a sus propias
vivencias.
Debido a que las voces de las personas con discapacidad
fueron a lo largo del tiempo desvalorizadas, si es que no
directamente negadas por perspectivas biologicistas y
materialistas -tanto del modelo médico como del modelo
social respectivamente- surge la propuesta de un primer
objetivo específico de esta investigación: caracterizar y
problematizar los aportes del modelo médico y modelo
social en relación a las experiencias vividas desde la di-
mensión corporal de las personas con discapacidad. Otro
objetivo, consiste en relevar experiencias vivenciales que
construyen las mismas durante sus trayectos educativos
en la UNSJ, para luego interpretar y reconstruir los su-
puestos más significativos relejados en ellas.
Dicha investigación es expresada desde una dimensión
de índole teórica e interpretativa desde herramientas
analíticas y científicas ostentadas.
2. Metodología
La investigación se desarrolla a partir de una metodolo-
gía de tipo cualitativa, debido a que ésta posibilita exa-
minar las formas en que las personas perciben y experi-
mentan los fenómenos que los rodean, profundizando en
1 Muñoz, I. (2020-2022). Discapacidad y Universidad: Experiencias,
voces y sentires acerca de las situaciones de discapacidad vivenciadas
por estudiantes de la UNSJ. Beca interna de investigación y Creación
CICITCA: Iniciación. Universidad Nacional de San Juan.
sus diversos puntos de vista, diversas interpretaciones y
significaciones. Dicha metodología, estudia las perspec-
tivas en un ambiente natural y en vinculación con su con-
texto (Sampieri, 2014).
El carácter de esta investigación es exploratorio-descrip-
tivo, basado principalmente en técnicas de reconstruc-
ción bibliográfica-documental, técnicas de recolección y
análisis de datos, tal como es el caso de las entrevistas
semi-estructuradas.
En cuanto a la muestra seleccionada es de tipo no proba-
bilística, donde la finalidad no es tanto cubrir la totali-
dad del universo, sino seleccionar los casos significativos
acordes a la intencionalidad de la investigación, para así,
obtener una intensidad en la información cualitativa (se-
lección de dos carreras del espacio de Facultad de Cien-
cias Sociales (FaCSo) por la accesibilidad de las unidades
de análisis).
Vale aclarar que, el criterio de heterogeneidad de disca-
pacidades (motriz, intelectual y visual) es el que funda-
mentalmente guió la búsqueda de indagación de infor-
mantes claves, con la proyección de obtener disímiles
perspectivas de las personas entrevistadas y una diversi-
dad de experiencias vivenciales singulares.
Para referir a personas con discapacidad en el escrito, se
toma en consideración teórica la Convención sobre los
Derechos de las Personas con Discapacidad
2
, mencio-
nando y dirigiéndome a las mismas desde dicho acervo
teórico.
2 Congreso De La Nación Argentina. (2008). Ley N°26378 “Conven-
ción sobre los derechos de las personas con discapacidad. Recuperado el 31
de julio de 2023 de http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/ane-
xos/140000-144999/141317/norma.htm. En este escrito normativo, la
discapacidad es descripta desde el Modelo Social, donde la misma es
resultado del conjunto de barreras contextuales, sociales y culturales,
generadoras de desigualdad y discriminación.
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
72Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
3. Marco teórico
3.1. Aproximaciones teóricas e históricas de la Dis-
capacidad desde su conceptualización
3
El origen del modelo médico o tradicional como también
se lo ha llamado, proviene del surgimiento del mundo
contemporáneo. Dicha perspectiva ha sido dominante en
el siglo XIX en la cultura de Occidente. Los aspectos prio-
ritarios originarios a su consolidación, podrían deducir-
se respecto a dos acontecimientos sociales: la primera
guerra mundial y los accidentes laborales. Tal así, que en
ese momento la discapacidad comenzó a ser vinculada
con los heridos de la guerra y ser pensada y mirada como
un asunto representativo de daño, prejuicio y discrimi-
nación en la esfera social.
El modelo médico o tradicional, conceptualiza a la disca-
pacidad como un asunto personal causado por una enfer-
medad, un traumatismo o cualquier otra alteración de la
salud, o en otras palabras la “dificultad” de las limitacio-
nes corporales, psíquicas y sensoriales serían propias del
individuo, y necesita para su recuperación de asistencia
médica y rehabilitación a través del desempeño de profe-
sionales especializados en el área de la salud. En efecto,
las medidas profesionales son plenamente individuales
y se orientan a la recuperación, solución, y/o adaptación
del individuo en la sociedad (Velázquez, 2009).
Es decir, presentar una discapacidad es propio de tener
un cuerpo defectuoso, carencia o deficiencia que lleva
a condicionar y negar la autonomía de las personas con
3 Se debió ahondar en las perspectivas teóricas de los modelos
teóricos más consolidados, como es el Modelo medico hegemónico y
Modelo social en el campo de la discapacidad, y de ahí, se puso de ma-
nifiesto la recurrente desvalorización de las experiencias del colectivo
de personas con discapacidad a lo largo de la historia (Díaz, Ferreira
y Martin, 2015).
Asimismo, ambos modelos teóricos son actualmente trabajados en
profundidad en el Proyecto de Investigación Creación y Desarrollo
Tecnológico y Social CICITCA - UNSJ (2023-2024): “Narrar la disca-
pacidad. Un alisis de las experiencias relatadas por estudiantes en
situación de discapacidad de la Facultad de Ciencias Sociales”. Direc-
tora: María Cecilia de los Ríos.
discapacidad (Ferreira 2010, citado en Dalmeda y Chha-
bra, 2019). La última, es atribuida a la persona y es vista
como una desviación de la normatividad biológica. Se
basa en la idea de que los problemas y dificultades están
plenamente atañidos con su déficit corporal, biológico,
psicogico.
Cáceres (2004) toma en consideración que la categoría de
discapacidad ha sido nutrida por la Organización Mun-
dial de la Salud (OMS) debido a la necesidad de mejorar
los procesos versátiles en las realidades. Cabe mencio-
nar, que la “Clasificación Internacional de Deficiencias,
Discapacidades y Minusvalías” (CIDDM) creada en 2001,
se encarga de revisar los aportes realizados por la “Clasi-
ficación internacional del funcionamiento, de la discapa-
cidad y de la salud” (CIF) de 1980.
Ambas clasificaciones mencionadas, se derivan de la
perspectiva teórica de la Organización Mundial de la Sa-
lud (OMS), que, desde una demanda continua de anali-
zar nuevas inquietudes científicas sociales, se encargan
de indagar y relejar la evolución del concepto de disca-
pacidad (Cáceres, 2004).
En concreto, hay dos cuestiones significativas en torno a
la discapacidad en este modelo, en primer lugar, sitúa el
dominante quehacer médico clínico que investiga el in-
terior de la mente humana, cada vez más dirigida a pro-
cesos neurológicos, procesos fisiológicos o la anatomía
corporal. En segundo lugar, predomina una condición
de normatividad, o estándar corporal esperado social-
mente, siendo la persona con discapacidad objeto de un
conjunto de mediaciones terapéuticas rehabilitadoras
para lograr una óptima adaptación del colectivo con dis-
capacidad al entorno social, familiar, educativo y laboral
(Moscoso, 2006).
Entonces, desde la mirada del modelo, la principal “difi-
cultad” se encuentra en el individuo y en sus déficits, a
quien es necesario curar desde una dimensión psíquica,
física y/o sensorialmente. En otras palabras, se conside-
ra a la discapacidad exclusivamente como una cuestión
a resolver de manera particular, siendo ocasionada por
una patología, accidente o condición de la salud que de-
manda la intervención especializada de saberes médicos
(Palacios y Barifi, 2007).
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
73Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
El modelo social de la discapacidad sitúa su origen en
los años sesenta o principios del setenta del siglo XX, en
Estados Unidos e Inglaterra. Hasta esa instancia, en las
sociedades de occidente la discapacidad era considerada
como el resultado de las restricciones de cada persona,
siendo vista como una “tragedia personal” para las per-
sonas con discapacidad y un “problema” para el resto de
la humanidad (Palacios y Barifi, 2007).
En las décadas de 1960 y 1970 surgió una ola de movi-
mientos socio-políticos que estaban conformados por
personas con discapacidad de diferentes partes del mun-
do. Uno de varios movimientos formados fue conocido
como UPIAS (“Unión de personas físicamente deficientes
contra la segregación”) y desarrolló un cuestionamiento
y estudio continuo respecto a las diversas interpreta-
ciones ortodoxas de la discapacidad y de las numerosas
barreras sociales que presentaban las personas discapa-
cidad que, al mismo tiempo, eran rotulados como “disca-
pacitados” por la sociedad en particular.
Este cambio de eje, que va del sujeto individual a la socie-
dad es una de las características principales que el mode-
lo social de la discapacidad asume.
La conceptualización del modelo social de la discapaci-
dad se ha propulsado, desarrollado y vinculado a partir
de la interrogación continua a las premisas teóricas des-
criptas por el modelo médico o tradicional. Particular-
mente, la idea básica del modelo radica en que los facto-
res que ocasionan la discapacidad no son individuales,
sino son plenamente sociales, culturales, económicos,
entre otros.
Asimismo, el modelo social de la discapacidad realiza
un cambio profundo respecto a los modelos previos, las
causas que ocasionan la discapacidad se consideran pro-
ducto del funcionamiento del sistema capitalista. Asu-
men que la discapacidad es una construcción social, que
remite a procesos que se imponen en las personas, y que
la categoría interpretativa fundamental es la de opresión
social (Palacios y Barifi, 2007)
Es decir, se concibe e interpreta a la discapacidad como
un fenómeno social, resultado de prácticas, hábitos, ac-
ciones sociales “discapacitadoras, entendidas como:
Las resultantes de una sociedad que construye su
entorno y sus instituciones desde un paradigma de
normalidad, es que es incapaz de reconocer e inte-
grar la diversidad en su seno. La discapacidad pasa
entonces a ser la vivencia de una discriminación u
opresión en lugar de una desviación de la normali-
dad del cuerpo médicamente definido como sano.
(Bernal 2016, p.42)
Siguiendo los aportes de Palacios y Barifi (2007), las
causas de la discapacidad se encuentran inmersas en
la sociedad. A la vez, define a la discapacidad como una
construcción y una manera de opresión social, siendo el
resultado de una sociedad que discrimina a las personas
con discapacidad de forma sistemática e histórica.
De acuerdo a Barnes (2003), la UPIAS distingue entre
el concepto de deficiencia y discapacidad. La prime-
ra, denota la dificultad de una parte del cuerpo o en la
posesión de una extremidad, mientras que la segunda,
consiste en las desventajas existentes en aquellas activi-
dades que forman parte de la cotidianidad de las perso-
nas con discapacidad en particular, excluyéndolas de las
actividades del colectivo en general. Es decir, en la pri-
mera se releja un aspecto biologisista en su concepción,
mientras que, en la segunda, denota un aspecto social en
su expresión puesto que se considera que es la misma so-
ciedad la que construye barreras impidiendo la igualdad
de oportunidades de toda la ciudadanía.
Así fue que, la participación política del colectivo – UPIAS
y sus entidades, posibilitaron el impulso del auge de los
derechos civiles y la legislación antidiscriminatoria en
los orígenes del modelo.
En concreto, es significativo destacar que dicho modelo
de la discapacidad se funda en un acervo teórico y empí-
rico colectivo e individual de las personas con discapa-
cidad sin dejar de lado aspectos vinculados con la defi-
ciencia, las actividades médicas adecuadas, ni la cultura,
más bien, se busca en este modelo generar la posibilidad
de un cambio estructural y cultural, visibilizando las eti-
quetas impuestas a las personas con discapacidad cuyas
características biológicas son consideradas socialmente
inaceptables (Barnes, 2003).
De esta manera, al hacer referencia a las reformas es-
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
74Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
tructurales y culturales, se vinculan con las barreras eco-
nómicas, políticas y culturales que de manera cotidiana
enfrentan las personas con discapacidad en la sociedad.
La discapacidad es un fenómeno social; no se trata sim-
plemente de un problema médico que afecte de manera
aislada a ciertos individuos, sino de un colectivo estruc-
turalmente condenado a la marginación por la incapa-
cidad de adaptación a sus necesidades por parte de la
sociedad en la que viven. Como fenómeno social, la dis-
capacidad es impuesta por la sociedad, no es un atribu-
to de la persona: en ella están implicadas el conjunto de
prácticas, representaciones y jerarquizaciones que deter-
minan la existencia particular de los sujetos individua-
les como miembros de una colectividad que les dota de
oportunidades, identidad y recurso (Ferreira, 2010).
3.2. Experiencias vivenciadas y sentidos desde una
dimensión corporal
El cuerpo es construido en la sociedad desde tres instan-
cias. El primero, consiste en que el cuerpo es originado
mediante una serie de discursos que describen de una
cierta y determinada manera al mismo, la segunda, cla-
sifica y controla la definición de las corporalidades me-
diante una serie de intervenciones y políticas dirigidas, y
la tercera instancia considera que el cuerpo es el resulta-
do de disertaciones y prácticas políticas plasmadas en la
cotidianidad y su visión subjetiva impuesta en ellas (Fe-
rreira (2010), citado en De los Ríos, 2020).
El individuo moderno, universal y aceptado socialmente
se define desde patrones de racionalidad, capacidad in-
modificable de cognición, y la razón como pensamiento
inmaterial. Sin embargo, el cuerpo comprende al indi-
viduo irracional, es decir, la racionalidad es vista desde
una perspectiva objetiva y neutra, mientras que la irra-
cionalidad es vista desde una perspectiva emocional y
subjetiva, y es en ésta, donde se indagan las corporali-
dades humanas y modificables (Díaz, Ferreira y Martin,
2015). De forma general, las personas con discapacidad
se encuentran excluidas, marginadas y borradas al in-
terior del contexto contemporáneo en base a las carac-
terísticas de éxito social pre-establecidas. Es decir, la
dimensión corporal ajustada a la discapacidad atenta
en un plano estético-visual desde sus lineamientos di-
rigidos. De acuerdo a los autores, el foco inquietante es
lo corporalmente hablado, y, por ende, lo culturalmente
inculcado (Díaz, Ferreira y Martin, 2015).
Con las características originadas e impuestas en la mo-
dernidad, los cuerpos de las personas con discapacidad
son significados y re-significados desde nuevos indica-
dores valorativos, principalmente siendo mirados desde
la eficacia y viabilidad productiva - no productiva, y des-
de allí, se dirigen factores de inclusión o exclusión en los
espacios circundantes de la sociedad (Martin y Castillo,
2010).
Por lo tanto, el cuerpo con discapacidad en el orden so-
cial, crea una sorprendente mirada, en los orígenes de
“lo raro”, “lo desordenado”, “lo diferente”, construyendo
clasificaciones de inhabilitación y apariencia física inte-
riormente en el imaginario social (Le Breton, 2002).
A su vez, en el interior del orden social mencionado, las
corporalidades de las personas con discapacidad son ca-
racterizadas de diversas formas y modalidades, desde
los modelos de la discapacidad, en esta ocasión, el mé-
dico y social, otorgando sentido a los cuerpos desde sus
posicionamientos teóricos.
Desde el modelo médico, el cuerpo de la persona con dis-
capacidad es situado desde la anormalidad y con ciertos
estigmas negativos, estos pueden visualizarse al mencio-
nar al cuerpo como: incompleto, incapaz, monstruoso,
vulnerable, silencioso, entre otros.
Es decir, los cuerpos de las personas con discapacidad
permanecen en el silencio y la descalificación al no per-
tenecer a patrones de normalidad vigentes. Por ende, la
discapacidad es comprendida como un asunto personal y
la corporalidad de la persona es definida desde la inferio-
ridad respecto a los demás (de los Rios, 2020).
En la definición corporal desde el modelo médico, exis-
te una diferencia entre la perspectiva corpórea vivencial
(desde la subjetividad) y la mirada incidida por el diag-
nóstico experto (desde la objetividad). De forma habi-
tual, es esta última visión la que determina y sanciona
la condición de las personas con discapacidad mediante
normativas y decisiones opresoras. A su vez, la persona
mediante dicha mirada comienza a construir su identi-
dad como persona con discapacidad.
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
75Moz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
Es decir, la mirada del cuerpo es definida desde la bio-
logicidad y tecnicidad del modelo médico-rehabilitador,
al considerar a la parte física como algo “roto”, “perdido
y que debe “arreglarse, pero además de ello, la corpora-
lidad subjetiva, es dejada de lado, no indagada, siendo
incuestionable, quedando fuera aquellas experiencias
propias de las personas con discapacidad, siendo mirado
como un “objeto” sin considerar emociones y sentimien-
tos.
Dicho en otras palabras, estos patrones de normalidad,
se vinculan con mecanismos de eficacia, utilidad, belle-
za que sirven para encajar en una sociedad plenamente
capitalista, productiva, basada en la eficacia humana y
de esa manera “sentirse” y/o “estar” incluido en la coti-
dianidad.
Ante dicha situación, se produce una división social de
prototipos de corporalidades en la sociedad capitalista:
cuerpos legítimos e ilegítimos. Mientras que en el prime-
ro se unifican aquellos “cuerpos útiles eficientes” y en el
segundo, aquellos “cuerpos inútiles e ineficientes” y son
éstos quienes deben corregirse para adaptarse a la socie-
dad, siendo excluidos diariamente en diversos espacios
sociales, culturales, económicos, políticos y son segre-
gados en grupos reducidos y discriminados (Ferrante y
Venturiello, 2014).
Cabe aclarar que, las corporalidades y las vivencias sub-
jetivas de la persona con discapacidad, son consideradas
como aspectos que biologizan y problematizan reitera-
damente la discapacidad, existiendo una débil proble-
matización, criticidad e indagación sociológica en dicho
modelo teórico de la discapacidad (Ferrante y Venturie-
llo, 2014).
En contraste, el modelo social de la discapacidad pre-
tende dar cuenta de la desnaturalización del cuerpo de-
ficiente y eso llamado cuerpo capaz (Ferrante y Ventu-
riello, 2014). Por eso, la invisibilizacion del cuerpo, forma
parte del compromiso motivador en indagar la dimen-
sión social de la discapacidad.
Los cuerpos de las personas con discapacidad no dejan
de ser pensados, estudiados y comprendidos desde el
campo de legitimidad e ilegitimidad. A partir de esta
argumentación de definiciones, se confrontan patrones
de cuerpo hábil e inhábil, debido a la sociedad produc-
tiva capitalista, y, por ende, el cuerpo de la persona con
discapacidad se encuentra encerrado en características
impuestas del cuerpo improductivo e incapaz (Ferrante,
2010).
Esta diferenciación de legitimidad se relaciona con va-
rios comportamientos de dominación, los cuales se pre-
tenden captar y visibilizar para conocer diversas formas
de generar discapacidad en la sociedad en general y en
las personas en particular. En otras palabras, refiere a
visibilizar los posicionamientos desemejantes en la coti-
dianidad donde se encuentran, y desde allí, comprender
los estereotipos producidos por las condiciones mate-
riales, sociales, culturales, simbólicas y las consecuentes
marginaciones que inciden precisamente en el trayecto
corporal de las personas con discapacidad.
En correlación, de acuerdo a Ferrante y Venturiello
(2014), el modelo social de la discapacidad se encarga de
indagar la desigual conceptualización entre deficiencia
y discapacidad, lo biológico y lo social, el cuerpo y el en-
torno, la mirada individual y la social, lo subjetivo y lo
objetivo, el cuerpo y la discapacidad, etc.
El cuerpo en el modelo social de la discapacidad sigue
permaneciendo oculto, invisibilizado, estigmatizado
desde la experticia médica y cultural, indagando sobre la
discriminación generada en las personas, pero a su vez,
en dicha conceptualización, perduran las incapacidades
y dificultades corporales que permanecen del modelo
médico hegemónico a lo largo del tiempo.
Es decir, dicha perspectiva teórica tiene intenciones de
indagar sobre la opresión y discriminación que presen-
tan las personas con discapacidad en la sociedad, y dis-
tingue conceptos de discapacidad y deficiencia. Sin em-
bargo, esta última mantiene aún su carácter de anomalía
aplicada en las corporalidades humanas. Dicha perspec-
tiva, no plantea normalizar los cuerpos como sucede en
el modelo médico, pero permanece la idea conceptual
de alguna forma, subsistiendo los cuerpos percibidos y
aceptados dentro de una norma biomédica y normaliza-
dora.
Por ende, en los orígenes del modelo, la deficiencia y el
cuerpo como ejes de estudio, quedan sin ser cuestiona-
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
76Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
dos, siendo condiciones naturales diagnosticados desde
el saber médico.
4. Experiencias de personas con discapacidad
en la Universidad Nacional de San Juan desde
sus relatos
Es importante aclarar que, si bien las trayectorias edu-
cativas no son eje de estudio central en esta ocasión, sin
embargo, al enfocar la indagación en las experiencias
consolidadas y narradas por las personas con discapaci-
dad en el ámbito académico superior, indirectamente es
importante mencionarlas y teorizarlas.
Las trayectorias educativas de personas con discapaci-
dad se respaldan en el derecho a la educación inclusiva.
Este derecho se encuentra contemplado en varios mar-
cos legales: Art.24 de la Convención de los Derechos de
las Personas con Discapacidad/06; Art.2 de la Ley de
Educación Nacional 26.206/06. En el nivel superior, en
el año 2002, la Ley 24.521 (1995) fue modificada en par-
te por la posterior Ley de Educación Superior 25.573 con
incorporaciones de la inclusión en el trayecto educativo,
planteando que las Universidades Nacionales e Institu-
ciones de nivel superior tienen la obligación de brindar
el derecho al acceso en el sistema sin discriminaciones,
al medio físico, a los servicios de interpretación y brindar
apoyos técnicos necesarios para el colectivo con discapa-
cidad.
Principalmente, es necesario repensar y hacer hincapié
en las trayectorias educativas que se muestran desde la
inclusión educativa como derecho inquebrantable, debi-
do que compromete al estado como motor principal en la
garantía de los derechos. Terigi (2010 citado en Carelli,
2020), refiere a trayectorias escolares teóricas y trayec-
torias escolares reales. Las teóricas consideran que el
espacio educativo define y condiciona una organización
cronológica que inluye el movimiento de los estudiantes
en el sistema. Las reales, realizan un quiebre en la direc-
ción lineal de las trayectorias teóricas forjando en la co-
tidianidad de la educación nuevos desafíos, por ejemplo,
la visibilizacion de las transiciones escolares tales como
ingresos, egresos, discontinuidad por diversidad de si-
tuaciones vinculadas a la vida adolescente-adulta, etc.
Nos interesa en esta sección, dar a conocer el análisis
realizado a los diferentes relatos obtenidos acerca de las
múltiples experiencias vivenciadas por estudiantes con
discapacidad de la FaCSo.
La reconstrucción teórica que previamente llevamos a
cabo con relación a los modelos y la dimensión corporal
desde la construcción de la discapacidad, nos darán fun-
damentos para orientar los puntos y supuestos significa-
tivos de análisis.
4.1. Identificando aportes desde los modelos teóri-
cos principales
Partiendo de una idea general, el surgimiento de cada
modelo teórico de la discapacidad trae consigo una serie
de interrogantes vinculadas a la idea de la misma, sus
causas y el papel que desempeña la persona con discapa-
cidad en la sociedad. Tomando en consideración que no
existe una sola manera de describir y comprender la con-
cepción de discapacidad debido a que se ha ido cambian-
do y reconstruyendo crecientemente a lo largo del tiem-
po, se distinguen dos posturas teóricas preponderantes
de la discapacidad: el modelo médico o tradicional y el
modelo social (Ortega, 2018).
Considerando la conceptualización que aporta el autor
mencionado, se refiere analíticamente los siguientes
fragmentos, en el primero, se visualizan las caracterís-
ticas de normalidad biomédica, mientras que, en el se-
gundo, se relejan barreras diversas del fenómeno social,
enfrentando las dos perspectivas teóricas sobre la disca-
pacidad.
El primero expone:
() yo antes lo consideraba como un problema
,
ahora no,
ahora es como algo, una condición pero que no te con-
diciona a la vez porque vos podés estudiar, podes traba-
jar, podés tener una familia, podés hacer todo, no hay
condición, no te condiciona. Entonces, yo antes lo veía
así como un problema (…) porque tengo que tener este
problema. Tenía que verlo como una condición, que tenía
que aprender a convivir y aprendí a convivir y estoy con-
viviendo todos los días () Estudiante A
El segundo expone:
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
77Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
() la discapacidad mayormente es una palabra mayor-
mente… para darle a una persona una característica com-
pleja o un número porque personas con discapacidad
existen, pero la discapacidad es la sociedad ¿Por qué?
Porque una persona con discapacidad se siente excluida,
evadida y no entiende el por qué… cuando en realidad
la discapacidad no hace falta que la persona la padezca,
sino está en todas las personas (…) Estudiante C
Por lo tanto, en el primer fragmento se expresan carac-
terísticas de la mirada médica consolidada de la disca-
pacidad, donde las palabras como “problema, condición,
convivencia” muestran a la discapacidad como una en-
fermedad, asunto personal, alteración de salud o dificul-
tad en cuestiones corporales, psíquicas y sensoriales que
requiere de un sistemático tratamiento y rehabilitación
médica. Por ende, este posicionamiento, requiere que la
persona en situación de discapacidad “se adapte” al en-
torno y a su vez “conviva” con ello (Oliver, 1998 citado en
Velázquez, 2009).
A diferencia del segundo fragmento, la discapacidad es
ubicada con características del entorno social, es decir
las barreras que hacen o construyen a la misma no perte-
necen a los individuos principalmente, sino en quienes lo
conforman, cambiando de esta forma el foco de análisis.
De forma particular, desde aportes teóricos, las perspec-
tivas que transitan desde el individuo a la sociedad en la
consolidación de la discapacidad, es un cambio funda-
mental que el modelo social asume al respecto. Plantean-
do que, los factores que ocasionan la discapacidad son
plenamente sociales, culturales, económicos, entre otros.
Es decir, se concibe e interpreta a la discapacidad como
un fenómeno social, resultado de prácticas, hábitos, ac-
ciones sociales discapacitadoras (Bernal, 2016).
En el siguiente fragmento se visualizan características
de ambas perspectivas teóricas:
() Me ha pasado y me sigue pasando… que me pregun-
ten… ¿Qué es eso? Entonces tenés que contarle todo lo
que es la dislexia… que es una dificultad… ¿Sí? Que para
la mayoría digamos lo toman como un problema social
y psicológico porque hay diferentes digamos… paradig-
mas. Hay unos que lo toman como una dificultad otros
como una discapacidad. Entonces, contar todo esto a una
persona que tiene mi edad, es como ¿me estás jodiendo?
¿Me estás jodiendo? (…) Estudiante B
Visualizando la expresión anterior, en contraste con los
anteriores relatos, se relejan supuestos pertinentes a
ambas miradas de la discapacidad, debido que es men-
cionada como “dificultad, “problema social-psicológico”,
y el hecho de plantear que “hay diferentes paradigmas,
traslada el reconocimiento y legitimización de las pers-
pectivas teóricas que se han ido reconstituyendo a lo
largo del tiempo en la historia del surgimiento de la dis-
capacidad.
A su vez, esto se encuentra en vinculación con los aportes
teóricos que plantea Palacios y Barifi (2007), ubicando
los orígenes de la discapacidad en el entorno social, di-
señándose como una construcción y opresión socio cul-
tural, siendo el contexto quien se encarga de ocasionar
acciones de discriminación hacia las personas en situa-
ción de discapacidad de manera repetitiva a través del
tiempo.
Por ende, la mirada social de la discapacidad presta aten-
ción a las barreras sociales y contextuales que forman
parte del fenómeno social y, en el fragmento anterior,
se visualiza la incidencia social en la construcción de la
misma. En vinculación, en esa confrontación manifes-
tada en el fragmento, se releja la idea de separación de
conceptos que Barnes (2003) propone al respecto sobre
deficiencia y discapacidad, fundado desde la perspectiva
social.
A su vez, posteriormente se releja lo que Barnes (2003)
plantea respecto a la necesidad de diseñar un cambio
desde una dimensión estructural y cultural, en el sentido
de reconocer y romper con las barreras impuestas desde
las etiquetas dirigidas hacia las personas en situación de
discapacidad.
Al respecto, el entrevistado comenta:
() Cuando vos decís discapacidad la otra persona te ve
como algo malo “una persona que tiene discapacidad.
Entonces, por ahí a veces buscar las palabras adecuadas
para que la otra persona te castigue, te diga chau…. Si vos
no tenés una discapacidad… sí tengo una discapacidad….
Pero bueno, hay que buscar formas, porque si vos le ha-
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
78Moz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
blás como discapacidad, como te dije recién, la mayoría
de la gente conoce por discapacidad auditiva, motora (…)
Estudiante B
Por lo tanto, se visualizan varias cuestiones a identificar
e indagar al respecto: “te ve como algo malo, “buscar pa-
labras adecuadas, “la otra persona te castigue, te diga
chau”, “la mayoría de la gente conoce…” dichas expre-
siones, constantemente refieren a la mirada del “otro” u
“otros” que forman parte de la sociedad, en este caso en
particular quienes conforman el ámbito universitario,
siendo estos quienes diseñan, manifiestan, crean, habi-
an barreras, etiquetas y estigmas al colectivo con dis-
capacidad.
Similarmente se expone lo siguiente:
La discapacidad es un fenómeno social; no se tra-
ta simplemente de un problema médico que afecte
de manera aislada a ciertos individuos, sino de un
colectivo estructuralmente condenado a la margi-
nación por la incapacidad de adaptación a sus ne-
cesidades por parte de la sociedad en la que viven.
Como fenómeno social, la discapacidad es impuesta
por la sociedad, no es un atributo de la persona: en
ella están implicadas el conjunto de prácticas, re-
presentaciones y jerarquizaciones que determinan
la existencia particular de los sujetos individuales
como miembros de una colectividad que les dota de
oportunidades, identidad y recursos. (Ferreira, 2010,
p. 13)
Teniendo en cuenta que el espacio protagonista en el
análisis presente es el ámbito universitario, mediante
el cual las personas en situación de discapacidad cons-
truyen, sitúan, habitan y transitan sus experiencias vi-
venciales, las mismas son vinculadas a la cotidianidad
propia de cada estudiante, en esta ocasión, en situación
de discapacidad. Cada práctica construida, se encuentra
implícitamente (o no) posicionada e incidida por la mira-
da o miradas de discapacidad que a lo largo del tiempo y
que en el “hoy” tanto la sociedad, las personas, los otros
y los espacios diversos han ido y están construyendo a su
interior.
Pensar, pensar-se y pensar-nos como principales cons-
tructores de palabras teoras y acciones que impactan en el
colectivo estudiantil, es fundamental para identificar y
comprender cuál es la postura teórica, científica y epis-
temológica que optamos como como marco de referencia
para transmitir saberes a los otros. Esos, quienes son for-
madores en un futuro desde cualquier lugar y, por ende,
desde lo académico universitario (debido al foco de es-
tudio).
4.2 Identificando aportes desde una experiencia
corporal vivenciada
El cuerpo es construido en la sociedad desde tres aris-
tas in luyentes entre ellas. Por un lado, se encuentran
las expresiones cotidianas mediante la consolidación de
discursos, por otro lado, las practicas dirigidas desde
ciertas políticas direccionadas, y también, la perspectiva
subjetiva aplicada en las últimas (Ferreira, 2010 citado
en de los Rios, 2020).
Se plantean las siguientes narraciones de personas con
discapacidad que transitan su recorrido educativo en la
universidad, donde puede visualizarse los discursos que
describen el cuerpo, a su vez, las intervenciones dirigi-
das, y también el conjunto de acciones prácticas cotidia-
nas.
Los entrevistados manifiestan:
() Porque no como estar volviendo a repetir otra vez,
como que necesito tener el cartel acá grande (señala la
frente) para que vean que soy disléxico. Por eso, como
siempre lo digo, tener discapacidad motora o auditiva
porque lo ven, están ahí, en cambio una dificultad o una
dislexia u otro trastorno, no… lo tenes que decir… y eso
te juega en contra porque la mayoría no te cree () Estu-
diante B
() Yo podía, que podía salir adelante, muchas veces en
las clases de educación física a mí me hacían estudiar
todo el reglamento, reglamento de vóley, reglamento
hándbol, todos los reglamentos porque decían que yo
no podía correr, entonces un día, como me cansé, estaba
muy cansada, agarré y no le pedí permiso a la profesora y
empecé a correr y claro, ella no me veía porque yo estaba
corriendo así y hasta que se dio cuenta que yo no estaba y
me dice no, no, espere no corra, usted no puede, y a usted
quién le ha dicho que yo no puedo (…) Estudiante A
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
79Moz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
() Mayormente a la persona ciega (suspiros) se la ve, no
solo la persona ciega, sino la persona con discapacidad se
la ve como un mueble o más allá de un mueble, como una
persona dependiente, que necesita depender siempre de
alguien, y la persona que está con la capacidad, debe es-
tar de cierta manera acomplejado o pendiente siempre
de la persona con discapacidad, porque lo cree o lo vi-
sualiza como una persona incapaz para no hacer nada,
para tampoco poder andar solo, ya sea en silla de ruedas,
no vidente, sea la discapacidad que sea. Lo ve como una
persona (…) incapaz (…) Estudiante C
En el primer fragmento se manifiestan expresiones ta-
les como: “no me creen”, la cual refiere a ese conjunto de
acciones prácticas, lenguajes y/o discursos que constan-
temente la sociedad y quienes la conforman dicen, expre-
san, describen, plasman de forma directa e indirecta en
la realidad socio-educativa, marcando diferencias entre
las personas en situación de discapacidad y aquellas sin
esta “marca”, “estigma” y “cartel” identificada y construi-
da. Al igual que el segundo fragmento, esa idea que se
repite de: “no puede, reconociendo y originando la dis-
capacidad, anulando la voz y oportunidad de que la per-
sona en situación de discapacidad tenga el respeto y goce
de los mismos derechos que el resto de los estudiantes.
En el tercer fragmento, el entrevistado menciona con cla-
ridad que “los otros” lo visualizan como una persona in-
capaz de realizar actividades, directamente silenciando
su voz, sus deseos, opiniones, su derecho de tener opor-
tunidades, y de vivir libremente su recorrido educativo
en plena autonomía.
En estas líneas expresadas anteriormente, la voz de las
personas con discapacidad en el trayecto educativo es
omitido, silenciado, diferenciado por el hecho de pre-
sentar una dimensión corporal característica, diversa,
distintiva a la mirada consolidada por los demás, predo-
minando lo hegemónico, convencional, reglamentario,
creando determinismo y estigma.
Por ende, en el entorno social existen formas de referir a
la discapacidad y a las personas, sobre todo, conceptuali-
zar las corporalidades creando comparaciones estéticas
desde la belleza y perfección.
La dimensión corporal desde la discapacidad es cons-
tituida desde el aspecto estético y visual en la mirada
social-cultural (Díaz, Ferreira y Martin, 2015). Es ma-
nifestada de varias maneras, proponiendo el siguiente
fragmento:
() (risas y silencios) Difícil porque, en el sentido, de que
yo (remarcando la pronunciación) te estoy hablando así
de esta manera, de esta visión que tengo, pero todavía
me cuesta mirarme al espejo de forma completa (silen-
cio) es medio contradictorio lo que estoy diciendo, pero
es así, es lo que me pasa… no me puedo mirar al espejo
de una forma completa porque no… como que siento que
lo puedo exteriorizar pero no… internamente todavía me
falta, me falta muchísimo todavía, entonces como me veo
al espejo y no me gusta, no me gusta lo que se ve (silencio)
y eso lo tengo que trabajar () Estudiante A
Siguiendo los planteos teóricos de los autores Díaz, Fe-
rreira y Martin, (2015) y lo escrito en el fragmento previo,
se puede manifestar que las personas con discapacidad
son miradas, evaluadas, configuradas, normativizadas,
comprendidas por el colectivo social desde la compara-
ción entre lo visible/invisible, perfección/imperfección,
normal/anormal, denominaciones y concepciones que
inciden constantemente en la forma de habitar y viven-
ciar la discapacidad por quienes viven y la subjetivan.
En vinculación con las características originadas e im-
puestas en la modernidad, los cuerpos que presentan
discapacidad son significados y re-significados desde
nuevos indicadores valorativos, principalmente siendo
mirados desde la eficacia y viabilidad productiva- no
productiva, y desde allí, se dirigen factores de inclusión
o exclusión en los espacios circundantes de la orbe social
(Martin y Castillo, 2010).
Por lo tanto, el cuerpo con discapacidad en el orden so-
cial, crea una sorprendente mirada, en los orígenes de
“lo raro”, “lo desordenado”, “lo diferente”, construyendo
clasificaciones de inhabilitación y apariencia física en el
imaginario social (Le Breton, 2002).
Particularmente, la discapacidad y las personas con dis-
capacidad son caracterizadas de diversas modalidades,
desde distintos enfoques, perspectivas o modelos, en
esta ocasión, el médico y social, otorgando significado al
cuerpo desde ambos posicionamientos teóricos.
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
80Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
El cuerpo desde el modelo médico es un objeto construi-
do por lo socialmente impuesto, al igual que desde la
medicina, y es visto como un cuerpo “enfermo” que debe
adaptarse al entorno social. Por lo tanto, esta idea de la
dimensión corporal y la mirada en la sociedad, genera
una dicotomía construida en las personas con discapaci-
dad: entre “los que están dentro” y “los que están fuera”
de parámetros de normalidad aceptados. El cuerpo des-
de el modelo social, es visualizado mediante una contra-
posición de dos conceptos inquietantes, la deficiencia y
la discapacidad, en ambos términos, la discapacidad no
presenta posiblemente un análisis crítico, claro y relexi-
vo (Martin y Castillo, 2010).
Se plasman a continuación dos fragmentos de un estu-
diante, donde se manifiestan aspectos relevantes pertene-
cientes a ambas perspectivas teóricas de la discapacidad:
() siento que mi cuerpo y abandonado de lo que yo era
antes a nivel físico no? el tema del deporte, poder realizar
cosas que antes podía hacer, como por ejemplo, () hin-
carme o arrodillarme… no me puedo arrodillar, una es
la edad () es como que tenga 63, porque no llego a estar
15 segundos y empiezo a sentir el dolor lo que son las ro-
dillas, los cartílagos y los músculos, la espalda entonces
es como siento que de cierta manera no es mi cuerpo…
como todo joven puede torcerse o pasar horas y horas ti-
rado en el piso, yo más de una hora no puedo estar ()
() La persona ciega el tema de las veredas y las guías…
no tener guías porque por más que hagan una vereda lla-
na por más que haya una senda o un mini relieve, lo que
podes es hacer redondo, girar dentro de un círculo. La
persona sorda, no hay personas capacitadas para poder
orientar ya sean calles o cualquier tipo de explicación
que necesite una persona sorda y muda igual () Estu-
diante C
En el primer fragmento, se pueden visualizar palabras,
expresiones, sentimientos y percepciones que re lejan as-
pectos de la perspectiva médica de la discapacidad, donde
la funcionalidad, movimiento, productividad del cuerpo
es primordial y necesaria para su desempeño cotidiano.
En el segundo fragmento, refiere de forma constante,
desde la experiencia obtenida en el ámbito universitario,
a la mención y explicación de aquellas barreras, obstácu-
los, o dificultades que están presentes en el espacio social
educativo que refieren a dos dimensiones: recursos ma-
teriales de accesibilidad y recursos humanos preparados
en el campo de la discapacidad (y sus diversas tipologías)
para enfrentar emergentes y/o escuchar/ identificar de-
mandas diarias.
Desde el modelo médico, el cuerpo es leído desde la anor-
malidad y los estigmas negativos que son relejados al
mencionar al cuerpo como: incompleto, incapaz, mons-
truoso, vulnerable, silencioso, entre otras expresiones.
Es decir, los cuerpos de las personas con discapacidad
permanecen en el silencio y la descalificación, al no per-
tenecer a patrones de normalidad vigentes. Por ende, la
discapacidad es comprendida como un asunto personal y
la corporalidad es definida desde la inferioridad respecto
a los demás (de los Rios, 2020).
En la definición corporal desde el modelo médico, exis-
te una diferencia entre la perspectiva corpórea viven-
cial (desde la subjetividad) y la mirada incidida por el
diagnóstico experto (desde la objetividad). De forma
habitual, quién determina y sanciona la “condición” del
colectivo con discapacidad es mediante normativas y de-
cisiones opresoras.
() nadie tenía… eh ninguna discapacidad y a mí me
veían como un bicho raro, entendés? () Estudiante A
Teniendo en cuenta lo anterior, se puede expresar, una
mirada reiterada sobre el posicionamiento de los “otros
que forman parte del contexto social, es decir aquellos
que construyen, perciben, significan, valorizan, estigma-
tizan, juzgan con sus palabras o expresiones un determi-
nado punto de vista de la discapacidad, y precisamente,
imponen una dimensión corporal única e incuestionable
(“Bicho raro”).
Un aspecto a destacar, consiste en definir (“los otros”) a
la persona como algo “raro, dirigiendo características
personales y etiquetas, patrones de normalidad/anor-
malidad de acuerdo a lo que la ideología social-colectiva
define como tal. Por ende, las reglas sociales, culturales,
económicas, simbólicas que se establecen inciden inme-
diatamente en el pensamiento, acción, construcción de
subjetividad de la persona en situación con discapacidad.
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
81Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
Es decir, con lo expuesto anteriormente se plantea que
la dimensión de corporalidad, es reiteradamente dejada
socialmente y culturalmente de lado, no indagada, sien-
do incuestionable, quedando fuera aquellas experiencias
propias de las personas con discapacidad, siendo mira-
das como un “objeto” sin considerar emociones y senti-
mientos, o, sin voz (y el cuerpo visto como algo más, sin
importancia). En fin, la definición del cuerpo sano y be-
llo, es semejanza de pleno y aceptado, siendo la visión es-
tética y capacitista quien regenta definiciones e interpre-
taciones de la dimensión corpórea en el colectivo social.
Si consideramos lo anterior, las corporalidades de las
personas con discapacidad son miradas y reconocidas
como plenamente incapaces por el resto de la sociedad.
En primer lugar, se coloca en interrogación constante la
autonomía, mediante los términos impuestos, tal es el
caso de “enfermedad” o “deficiencia”. En segundo lugar,
se dirigen procesos de estigma mediante el reconoci-
miento de un cuerpo “incapaz de…”. En tercer lugar, no
se adapta a patrones culturales de “belleza” o de “perfec-
ción” propios del contexto cultural, social y económico,
por lo tanto, eso contribuye a la desvalorización personal.
De esta manera, al interior de la sociedad, las personas
con discapacidad se encuentran con temores y vulnera-
bilidades diversas dirigidas por terceros y espacios con-
solidados, mediante el diseño de características corpora-
les diferentes entre unos u otros (Haller, 2010 citado en
Ferrante y Venturiello, 2014).
Por lo tanto, considerando este lenguaje común usado,
reproducido y de formas reiteradas por la sociedad y
quienes habitamos la misma, es consolidado e in luen-
ciado por los parámetros construidos en la Modernidad,
fuente principal de categorizaciones y clasificaciones,
viendo a la discapacidad como campo y dentro del mis-
mo, a la perspectiva médica como hegemónica (de los
Rios, 2021).
Cambiando de perspectiva teórica, desde el modelo
social, las corporalidades y las vivencias subjetivas, tu-
vieron en sus orígenes, una débil problematización, cri-
ticidad e indagación sociológica, buscando dar cuenta
principalmente la desnaturalización del cuerpo deficien-
te y capaz (Ferrante y Venturiello, 2014).
Sin embargo, su problematización y, por otra parte, la va-
loración de las experiencias subjetivas es urgente ya que
los cuerpos no dejan de ser pensados, estudiados y com-
prendidos desde el campo de legitimidad e ilegitimidad
social mediante definiciones, patrones del cuerpo hábil e
inhábil, debido a la hegemonía de la sociedad productiva
capitalista, y el cuerpo del con discapacidad se encuentra
encerrado en características impuestas (Ferrante, 2010).
El cuerpo es conceptualizado, como deficiencia o desvío
individual y por ende, corporalidades sin historicidades
singulares, sin posibilidad de significados, inlexibles,
desviados, sin motivo de acciones y capacidades algunas
(Hugues y Peterson, 2008 citado en Ferrante y Venturie-
llo, 2014).
Precisamente, el cuerpo de la persona en situación de
discapacidad en el modelo social, sigue permaneciendo
oculto, invisibilizado, estigmatizado desde la experticia
médica y cultural, indagando sobre la discriminación ge-
nerada en el fenómeno social y la inluencia en el colecti-
vo con discapacidad concretamente.
De acuerdo con Ferrante y Ferreira (2010), las personas
en situación de discapacidad se encuentran en una si-
tuación de dependencia y dominación corporal hacia “los
otros”. Esta situación de subordinación, se constituye de-
bido que la sociedad que no está “preparada” y “adapta-
da” para las personas con discapacidad, aquí es donde se
releja la opresión social, discriminación, exclusión o en
resumidas cuentas, una sociedad discapacitante.
Es decir, el cuerpo se sitúa en un espacio social, simbó-
lico y material desde la marginación, exclusión y segre-
gación que incide negativamente en aquellos patrones
y capitales simbólicos acumulados, impactando en su
inserción real al interior (es esta ocasión en el ámbito
educativo) del fenómeno social. A su vez, esta situación
de exclusión permanente de las personas en situación de
discapacidad, es manifestada en sus voces y deseos, de
forma implícita o explícita, reconociendo su dominación
y opresión social vivenciada (Ferrante y Ferreira, 2010).
Es relevante destacar, que dicha perspectiva no plantea
en sus fundamentos teóricos normalizar y medicalizar
los cuerpos, pero permanece implícitamente (y vicever-
sa) la idea conceptual, de alguna forma, sobre los cuerpos
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
82Moz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
percibidos y significados dentro de una norma biomédi-
ca, normalizadora y capacitista.
Por ende, en los orígenes del modelo, la discapacidad y
el cuerpo quedan sin ser cuestionados, quedando como
condiciones naturales diagnosticados desde el saber
médico. En las entrevistas realizadas e interpretaciones
fundadas al respecto, predomina dicha naturalización
en algunos relatos y situación de problematización -eno-
jo, criticidad y re lexividad en otros- de los estudiantes
entrevistados sobre la constante vulneración de dere-
chos en el entorno académico universitario, en particular
la dimensión corporal.
La representación del cuerpo-objeto, conduce a que nos
interroguemos acerca las implicancias de esa dicotomía
entre un cuerpo que ocupa el lugar de lo material, de lo
natural, susceptible de ser pensado en términos de pro-
piedad y mercancía, y un ser que lo habita, que lo dirige
y lo padece. El cuerpo como un resto animal, un otro que
debe ser disciplinado, producido para servir a una razón,
a una verdadera humanidad (Kipen y Lipschitz, 2009 ci-
tado en Rosato, Angelino y otros, 2009).
Las experiencias de las propias personas en situación de
discapacidad son múltiples, complejas y enriquecedoras,
no obstante, en reiteradas oportunidades in luyen más
los aspectos negativos e imposibilitadores para dar cuen-
ta de ellas (¿Barreras?). La estigmatización y el constante
desajuste personal” a lo normalmente estructurado, son
incorporados en las narraciones de las personas entre-
vistadas.
La idea de inclusión, vinculada en los parámetros de la
Educación Superior, parte de la significancia y el recono-
cimiento de las diversidades existentes y la revalorización
de las mismas. Por ende, en el espacio socio-educativo
universitario, se construye la necesidad de un aprendiza-
je mutuo, de todos, según las particularidades y especifi-
cidades y requerimientos propios de cada individualidad
(Carelli y Zuliani, 2020 citadas en Peralta, otros, 2020).
Las diferentes aristas descubiertas en las trayectorias
educativas, tanto teóricas como reales de acuerdo a Te-
rigi (2010) citada en Carelli (2020), identificadas en el
trabajo de campo realizado y en el análisis de la informa-
ción concretada, son significativas y heterogéneas.
Un punto a destacar consiste en que, si bien las personas
con discapacidad -es decir estudiantes entrevistados-
pertenecen al ámbito universitario específicamente, las
experiencias vivenciadas en el recorrido educativo se ca-
racterizan por ser desemejantes, singulares, personales,
subjetivas a lo largo de sus recorridos socio-educativos.
Si bien en la presente investigación se hace hincapié en
la importancia de los aportes del modelo social y modelo
médico de la discapacidad, las características del último
predominaron en los relatos de los estudiantes entrevis-
tados, ¿en qué sentido? Los entrevistados refieren en los
relatos narrados sobre su experiencia, que los estudian-
tes con discapacidad construyen, identifican, posicionan
la discapacidad (y la dimensión corporal) en el diario
universitario según la tipología de la misma, destacando
que el ámbito superior universitario en su dimisión edili-
cia, como en su dimensión del personal que conforma, no
se encuentra preparado o capacitado para trabajar con
personas con discapacidad (la mayoría de los entrevista-
dos). Mientras que la minoría, considera en sus relatos,
que no inluye el tipo de discapacidad en la experiencia
vivenciada en el espacio académico.
Por lo tanto, está vinculado a lo que Pereyra (2018) pro-
pone como un desafío fundamental, que en los espacios
universitarios creen herramientas institucionales espe-
cíficas a las diversidades identificadas para la relexivi-
dad verdadera en la labor educativa diaria.
A su vez, otro de los aportes pertenecientes a las caracte-
rísticas del modelo social de la discapacidad que se han
visto relejadas en los diversos relatos expresados por los
estudiantes, fue al mencionar un conjunto de barreras
sociales, culturales y de accesibilidad en el entorno aca-
démico que inciden en la construcción de sus trayectos
educativos (mayoría), y una minoría, no identifican ba-
rreras concretas edilicias, de accesibilidad, de recursos
materiales, pero sí las posiciona en las miradas externas
y por ende, en el imaginario social provenientes de los
“otros” sin discapacidad/sociedad. lo invisible/subjetivo.
Otro punto consiste en los recorridos educativos descrip-
tos por las personas discapacidad, puede visualizarse la
dimensión corporal de diversas maneras. En reiteradas
ocasiones, la misma es detectada, explicada e interpreta-
da como un factor negativo de sí mismo, siendo caracte-
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
83Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
rizada desde la subjetividad, estructura, normatividad,
biologicidad, estigma, vergüenza, autoestima, habili-
dad/capacidad, estética y vinculada a la salud mental
personal. El cuerpo es relejado en las formas de descri-
bir y mirar la discapacidad, de vivir-convivir en un con-
texto social estigmatizante y sin dudas, se visualiza en el
recorrido de las trayectorias educativas la mayoría de las
veces, implícitamente.
5. Relexiones finales
Es importante referir que la experiencia no se reduce a
los acontecimientos, por tanto, a lo que éstos significan
e importan para las personas. Se reconoce que tiene un
componente cognoscitivo, pero no se limita a meros as-
pectos racionales (Guzmán, Carlota y Otros, 2015). Den-
tro del concepto de experiencia, las autoras consideran
también un elemento de incertidumbre, tratando de alejar
la idea de control y racionalidad. Se pretende articular
los elementos sobre la noción de experiencia con las no-
ciones de vivencia y sentido.
Por ende, las tres categorías permiten comprender la
perspectiva de los estudiantes a partir de sus componen-
tes particulares, colectivos, subjetivos y culturales. Por lo
tanto, se propone que toda experiencia significativa se
construya a partir del cúmulo de vivencias y de sentidos
elaborados que la persona utiliza para guiar sus acciones
y, al mismo tiempo, la experiencia produce/permite la
reconsideración y re-significación de las vivencias y los
sentidos (Guzmán, Carlota y Otros, 2015).
Desde una mirada analítica, tomando como tres princi-
pales vías la experiencia, el sentido y la vivencia que han
construido, habitado y transcurrido los estudiantes con
discapacidad en el espacio académico universitario, son
diseñados e interpretados heterogéneas formas y disi-
miles miradas, las cuales han sido transformadas en su-
puestos analíticos a continuación.
En el supuesto “Discapacidad” predomina la perspectiva
de “nos ven como uno más”, “la discapacidad está en la
sociedad, encontrando miradas y posicionamientos di-
ferentes de la idea sobre discapacidad, habiendo un pun-
to en común, la mirada del resto en la construcción de
la misma.
En el supuesto de “Cuerpo” como se ha mencionado an-
teriormente, las respuestas durante las entrevistas rea-
lizadas fueron negativas, vinculado a la salud mental, y
cuestiones atañidas a la misma tales como la inseguri-
dad, inaceptación, frustración personal y dependencia
con otro, siendo estas dimensionas más reiteradas.
En el supuesto “El entorno y los otros”, se visibilizan
varias perspectivas que se identificaron en los relatos.
Consideran que el ámbito universitario es un espacio
diferente el cual no condiciona a las personas con dis-
capacidad y expresan sentimientos de agradecimiento
hacia la institución. También contrariamente, miradas
de que el colectivo con discapacidad que asiste necesita
y demanda ayuda para su propio desenvolvimiento; de-
mostrar al resto que “sí puede” estudiar; la construcción
de estigmas, mitos, frustración, victimización, descono-
cimiento, objetos; siendo ellas, definiciones construidas
por la mirada social del contexto socio-educativo.
Entre los relatos encontrados acerca de las experiencias
vividas y las dimensiones significativas, los estudiantes
consideran mayormente, que las personas o los pares que
los apoyan y orientan con frecuencia son otras personas
con discapacidad que han transitado su trayecto educa-
tivo en la universidad u otro ámbito superior; también
las personas que pasan mayor tiempo con ellos y los fre-
cuentan diariamente en el espacio académico.
Con relación a la accesibilidad, un punto en común que
se consiste en que los trayectos educativos vivenciados
por los estudiantes con discapacidad son particulares, y
descriptos según la tipología de discapacidad que pre-
sentan. Los estudiantes con discapacidad motriz consi-
deran que sí hay accesibilidad y se encuentran incluidos,
mientras que para las personas con discapacidad visual
e intelectual consideran que no hay accesibilidad en el es-
pacio mencionado (de acuerdo a los entrevistados).
Desde la perspectiva de las autoras Carelli y Zuliani
(2020), la educación es definida como un indiscutible
derecho humano que permite de forma imprescindible
el desarrollo de los demás derechos, teniendo como prin-
cipal objetivo brindar recursos para promover la forma-
ción integral al conjunto de seres humanos a lo largo del
tiempo, permitiendo el diseño del proyecto de vida.
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
84Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
En el presente trabajo, se ha buscado indagar sobre las
diferentes experiencias que estudiantes de la Universi-
dad afrontan en su trayectoria educativa basada en un
marco de derechos. La multiplicidad de vivencias de-
muestra que no hay un único recorrido ni una única for-
ma de nombrar ni vivenciar la discapacidad.
En ese sentido, se visualiza una constante conjunción de
percepciones ligadas a diferentes formas de comprender
y vivir la discapacidad que dan cuenta de la aún vigente
lucha y resistencia de las perspectivas de los modelos teó-
ricos abordados en este trabajo, esto es, del modelo médi-
co y social. Estos modelos son relejados y transversali-
zados en la construcción de experiencias de las personas
con discapacidad, generando un conjunto de cuestiones
vinculadas a la incomodidad, tensión y cuestionamiento
sobre las estructuras culturales hegemónicas.
La investigación pretendió realizar una descripción so-
bre la discapacidad desde las voces de sus protagonistas
y sus experiencias vivenciales en un contexto específico.
Tomando como foco central de análisis lo narrado, lo vi-
vido y sentido.
Para culminar el presente artículo, se proponen una serie
de preguntas inquietantes que surgen de la investigación
realizada en el periodo 2020-2022.
Por lo tanto, en el caso de las personas con discapacidad
del ámbito universitario: ¿Cuáles son las barreras pre-
sentadas en su trayecto educativo transitado? ¿Qué es-
trategias de acción son puestas en juego? ¿Cómo habitan
y describen su recorrido universitario? ¿Cuál es la inci-
dencia en su cuerpo en los recorridos? ¿Cuáles son sus
apoyos o facilitadores? ¿Cuáles son los enfoques predo-
minantes de discapacidad en este ámbito? Dichos cues-
tionamientos son algunos de los cuales pretenden ser
respondidos en actuales y posteriores investigaciones
4
.
4 Diseño presentado en Beca doctoral CONICET (2023-2028) (Acep-
tado): “Discapacidad y Trayectorias Educativas: un alisis desde ex-
periencias de personas con discapacidad en sus recorridos educativos
del nivel superior en la Provincia de San Juan.
Es por esto, que todo análisis crítico de la discapacidad
debe incluir una problematización continua al respecto.
La división entre los términos deficiencia/ discapacidad
presente en los planteos fundacionales del modelo social
debe ser tensionada. Además, aceptar el carácter político
del cuerpo no lleva a medicalizar la discapacidad, sino a
ir un paso más atrás en la argumentación teórica y re-
lexiva de la sociedad. A su vez, reconocer esta dimen-
sión, no implica incorporar un determinismo. El cuerpo
es entonces un espacio de la dominación y de la creación
de las personas. En el caso de la discapacidad en parti-
cular, esto implica que en un mundo social en el cual se
valoran, de acuerdo a la división social del trabajo, los
cuerpos útiles para la rentabilidad económica, poseer
una deficiencia significará potencialmente un estigma
o una tragedia individual. Pero que efectivamente lo
constituya o no, dependerá de las diversas variables que
singularizan la experiencia de la discapacidad en la coti-
dianidad de la vida social.
6. Bibliografía
Barnes, C. (2003). Un chiste “malo”: ¿Rehabilitar a las per-
sonas con discapacidad en una sociedad que discapa-
cita? En B. Patricia (2006) (compiladora). Visiones y
revisiones de la discapacidad (págs. 101-113). México:
Fondo de Cultura Económica. Disponible en: https://
es.scribd.com/document/502172000/UN-CHIS-
TE-MALO-VISIONES-DE-LA-DISCAPACIDAD-1-1
Bernal, V. (2016). La discapacidad organizada: antece-
dentes y trayectorias del movimiento de personas
con discapacidad. Historia actual online, 39(1), 39-
52. España. Disponible en: https://www.academia.
edu/27274667/LA_DISCAPACIDAD_ORGANIZA-
DA_ANTECEDENTES_Y_TRAYECTORIAS_DEL_
MOVIMIENTO_DE_PERSONAS_CON_DISCAPA-
CIDAD
Blanco. R. (2014). Universidad íntima y sexualidades pú-
blicas. La gestión de la identidad en la experiencia
estudiantil. Sexualidad, Salud y Sociedad Revista
Latinoamericana. 19, (154-159). Río de Janeiro, Brasil:
Centro Latino-Americano en Sexualidad de e Dire-
itos Humanos. Disponible en: https://www.redalyc.
org/articulo.oa?id=293335860009
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
85Moz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
Cobeñas, P (2021). Pensar la discapacidad para (re) pen-
sar las escuelas. EN: P. Cobeñas, V. Grimaldi, C. Broit-
man, I. Sancha y M. Escobar (Coords.). La enseñanza
de las matemáticas a alumnos con discapacidad. La
Plata : EDULP. pp. 28-103. En Memoria Académica.
Disponible en: http://www.memoria.fahce.unlp.edu.
ar/libros/pm.4591/pm.4591.pdf
Carelli, S, M. (2020). Caracterización de las trayectorias
educativas de estudiantes universitarios con disca-
pacidad: relatos de los protagonistas. En Peralta, S,
Benítez, B, Miguel, M, Díaz M, I (Eds.) La Inclusión
Educativa en el Nivel Superior. Miradas y perspecti-
vas polifónicas (Págs.197-212). San Juan, Argentina:
UNSJ.
Congreso De La Nación Argentina. (2002). Ley N° 25.573
“Ley de Educación Superior. Recuperado el 10 de
abril de 2023 de http://servicios.infoleg.gob.ar/info-
legInternet/anexos/70000-74999/73892/norma.htm
Congreso De La Nación Argentina. (2006). Ley N° 26.206
“Ley de Educación Nacional”. Recuperado el 10 de
abril de 2023 de http://servicios.infoleg.gob.ar/infole-
gInternet/anexos/120000124999/123542/norma.htm
Congreso De La Nación Argentina. (2008). Ley N°26378
“Convención sobre los derechos de las personas con
discapacidad. Recuperado el 10 de abril de 2023 de
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/ane-
xos/140000144999/141317/norma.htm
Cáceres R, C. (2004). Revisión teórica: Sobre el concepto
de discapacidad. Una revisión de las propuestas de
la OMS. Revista electrónica de audiología, 2, 74-77.
España. Disponible en: https://www.researchgate.
net/publication/348924403_Sobre_el_concepto_de_
discapacidad_Una_revision_de_las_propuestas_
de_la_OMS
Díaz, R, S., Ferreira, M. y Martin, M., otros. (2015).
Cuerpo y Emoción: la experiencia de discapaci-
dad en un mundo globalizado y neoliberal. En
GEOMETRIAS SOCIALES (Editores) (Págs. 257-
271). España. Disponible en: https://digital.csic.es/
bitstream/10261/153301/1/2017_Cuerpo-y-emoci%-
C3%B3n_Cap_Geometr%C3%ADas-sociales.pdf
Dalmeda, P. M. y Chhabra, G. (2019). Modelos teóricos de
discapacidad: un seguimiento del desarrollo históri-
co del concepto de discapacidad en las últimas cin-
co décadas. Revista Española de Discapacidad, 7 (1),
7-27. España. Disponible en: https://dialnet.unirioja.
es/servlet/articulo?codigo=6955448
De los Rios, M, C. (2021). La construcción social de la dis-
capacidad: cuerpos desobedientes a la norma y lo
especial como eufemismo. En Garcés, L y Lucero, M
(Comp.), Políticas y Programas sociales. Una mira-
da en clave regional y local (Págs. 89-108). San Juan:
UNSJ
Ferrante, C. y Venturiello, M.P. (2014). El aporte de las
nociones de cuerpo y experiencia para la compren-
sión de la “discapacidad” como asunto político. Re-
vista chilena de terapia ocupacional, 14 (2), 45-59.
Chile. Disponible en: https://revistaterapiaocupacio-
nal.uchile.cl/index.php/RTO/article/view/35709
Ferrante, C. y Ferreira, M. (2010). El habitus de la disca-
pacidad: la experiencia corporal de la dominación en
un contexto económico periférico. Revista Política y
Sociedad, 47 (1), 85-104. Madrid y Bs. As. Disponible
en: https://revistas.ucm.es/index.php/POSO/article/
view/POSO1010130085A
Ferreira, A. V. M. (2008). La construcción social de la dis-
capacidad: habitus, estereotipos y exclusión social.
Revista Nómadas, 17 (1), Roma, Italia. Ed: Euro-Me-
diterranean University Institute. Disponible en:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=18101716
Ferrante, C. (2009). Cuerpo, discapacidad y violencia
simbólica: un acercamiento a la experiencia de la
discapacidad motriz como relación de dominación
encarnada, Boletín Onteaiken, (8), 17-34. Corrientes.
Disponible en: https://es.scribd.com/doc/119448455/
Cuerpo-Discapacidad-y-Violencia-Simbolica
Guzmán, G. Carlota. Saucedo, R. (2015). Experiencias,
vivencias y sentidos en torno a la escuela y a los es-
tudios. Abordajes desde las perspectivas de alumnos
y estudiantes. Revista Mexicana de Investigación Edu-
cativa, vol. 20, núm. 67, 2015, pp. 1019-1054 Consejo
Mexicano de Investigación Educativa, A.C. Distrito
| 69 - 86
TRAMAS SOCIALES • N° 05 | ISSN: 2683-8095
86Muñoz Rubia | Experiencias y Voces de Discapacidad en la Universidad
ARTÍCULOS LIBRES
Federal, México. Disponible en: https://www.re-
dalyc.org/pdf/140/14042022002.pdf
Martin, T. M., Castillo, G. F (2010). Cuerpos, capacidades,
exigencias funcionales y otros hechos…de Procusto.
Revista Política y Sociedad, 47 (1), 67-83. Ed: Univer-
sidad Complutense de Madrid. Disponible en: ht tp://
hdl.handle.net/10261/23229
Moscoso, M. (2006). Lo que no somos: una breve re-
lexión a propósito de la discapacidad. La ortiga: re-
vista cuatrimestral de pensamiento y arte, 68(70), 73-
89. Chicago: UIC. Disponible en: https://digital.csic.
es/bitstream/10261/38883/1/nosomos.pdf
Muñoz, I. (2022). Discapacidad y Universidad: Experien-
cias, voces y sentires acerca de las situaciones de dis-
capacidad vivenciadas por estudiantes de la UNSJ
(Informe final de Beca interna de investigación y
Creación CICITCA: Iniciación). Universidad Nacio-
nal de San Juan, San Juan, Argentina.
Ortega C, M, T. (2018). Discapacidad y sociología: una
realidad en construcción. Modelos sociales que ex-
plican la discapacidad. INGURUAK. Revista Vasca
de Sociología y Ciencia Política(65), 44-61. España:
Universidad de Burgos Disponible en: https://www.
researchgate.net/publication/350816550_Discapaci-
dad_y_Sociologia_una_realidad_en_construccion
Palacios, A. y Barifi, F. (2007). Una aproximación a di-
ferentes modelos de tratamiento. En A. Palacios y F.
Barifi. (Ed.), La discapacidad como una cuestión de
derechos humanos. Una aproximación a la conven-
ción internacional sobre los derechos de las Personas
con Discapacidad (1-144). España, Madrid: Ediciones
Cinca. Disponible en https://www.sindromedown.
net/wpcontent/uploads/2014/09/19L_ladiscapaci-
dad.pdf
Rosato, A. y Angelino, A. y otros. (2009). Discapacidad
e ideología de la normalidad. Naturalizar el déficit.
Buenos Aires: Centro de Publicaciones Educativas y
Material Didáctico.
Dalmeda, P. M. y Chhabra, G. (2019). Modelos teóricos
de discapacidad: un seguimiento del desarrollo
histórico del concepto de discapacidad en las últi-
mas cinco décadas. Revista Española de Discapa-
cidad 7 (1), 7-27. Noruega. Disponible en: https://
docplayer.es/146708543-Modelos-teoricos-de-dis-
capacidad-un-seguimiento-del-desarrollo-histo-
rico-del-concepto-de-discapacidad-en-las-ulti-
mas-cinco-decadas.html
Pereyra, A y otros. (2018). Los desafíos de la educación
inclusiva: Actas del 4to Coloquio Internacional. Bue-
nos Aires. UNIPE: Editorial Universitaria. Disponi-
ble en: https://editorial.unipe.edu.ar/colecciones/ac-
tas-y-ponencias/cuarto-coloquio-detail
Le Breton, D. (2002). Cuerpo discapacitado. En Hugo
Vezzeti Colección claves (Ed.) Sociología del cuerpo,
(Págs. 76-79). Buenos Aires. Disponible en: https://
www.jeanlauand.com/LebretonSociologiaCuerpo.pdf
Universidad Nacional de San Juan. (2020). La construc-
ción social de la discapacidad. Las perspectivas teó-
ricas en las Ciencias Sociales. (Proyecto de Investiga-
ción-PROJOVI- A cargo de: de los Rios M. C.). FaCS.
Secretaria de Ciencia y Técnica. Instituto de Investi-
gaciones Socio-Económicas (IISE).
Sampieri, H, R. Fernández, C. Pilar, L. (2014). Investi-
gación Cualitativa. Metodología de la investigación.
Mc Graw Hill Education. Disponible en: https://
www.uca.ac.cr/wp-content/uploads/2017/10/Investi-
gacion.pdf
Seda, J. A. y Pieroni, N. (2020). Discapacidad y accesibi-
lidad en la educación superior: análisis de casos y
relexiones sobre la construcción de experiencias.
Rosario: UNR.
Venturiello, M. P. (2016). La trama social de la discapa-
cidad: cuerpo, redes, familiares y vida cotidiana.
Buenos Aires: Biblos. Disponible en: https://dialnet.
unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6231805
Velázquez Díaz, E. (2009). Relexiones epistemológicas
para una sociología de la discapacidad. Intersticios
Revista Sociológica de Pensamiento Crítico, 3(2),
85-100. España. Disponible en: https://www.intersti-
cios.es/article/view/4557
| 69 - 86